El autor, José Soto Chica, es doctor en Historia Medieval, profesor de la Universidad de Granada y especialista de la Antigüedad tardía. Si por algo se caracteriza Soto Chica es por ser un historiador que arriesga en sus investigaciones, huyendo de tesis y dogmas preestablecidos, si a esto le sumamos lo buen narrador que es, no es de extrañar el éxito que tienen todos sus libros, tanto en ensayo como en novela histórica. Todo esto queda de manifiesto en su nuevo libro, que recordamos es la primera biografía que escribe. El Leovigildo que nos dibuja el autor es la figura de un hombre esencialmente violento, un señor de la guerra al que le toco vivir en un periodo especialmente caótico y en una Hispania postromana marcada en ese momento del siglo VI por la sequía, la hambruna, la guerra y la peste. Leovigildo se convirtió en rey de un territorio fraccionado y en muy pocos años logró construir un reino poderoso en el que godos e hispanorromanos se regían por una misma ley.
El libro se divide en nueve capítulos, que abordan desde el contexto histórico y geográfico de la Hispania visigoda, hasta los aspectos políticos, militares, religiosos, y sociales del reinado de Leovigildo. El autor combina el rigor histórico con una narrativa que fluye de un modo vibrante, que hace que el libro se lea con interés en todo momento. Además, toda la obra está salpicada con numerosas figuras y fotografías, a las que se suman gran cantidad de mapas marca de la casa. Un excelente material extra que ayuda a complementar y facilitar el entendimiento de la información ofrecida a lo largo del libro.
Como he mencionado anteriormente, el autor nos presenta a Leovigildo como un hombre de su tiempo, que supo adaptarse a las circunstancias y aprovechar las oportunidades que se le presentaron para imponer su autoridad y su visión política sobre un reino diverso y conflictivo. Fue también un gran estratega y un guerrero implacable, que expandió sus dominios y derrotó a las diferentes entidades políticas que dominaban la península, tanto internas como externas. Sin embargo, no todo fue éxito y gloria en su vida. Leovigildo tuvo que afrontar graves problemas familiares, como su relación con su esposa Gosvinta, fascinante mujer, y la rebelión de su hijo Hermenegildo al final de su reinado. Leovigildo murió sin ver cumplido su sueño de unir a los godos y a los hispanorromanos bajo una misma fe, pero preparó el camino para que su hijo y sucesor Recaredo, tres años después de su muerte, completara la conversión de los visigodos al catolicismo y con ello la unidad religiosa del reino.
Leovigildo. Rey de los hispanos es un libro imprescindible para conocer la figura y la obra de uno de los reyes más importantes de nuestra historia, que sentó las bases del reino visigodo de Toledo, que duraría hasta la invasión musulmana de 711. El autor nos ofrece una visión equilibrada y documentada de Leovigildo, que no oculta sus defectos ni exagera sus virtudes, sino que lo muestra como un hombre complejo y fascinante, que marcó una época y dejó una huella imborrable en la historia.
Una reseña completísima e instructiva. Gracias.
ResponderEliminarBesotes!!!