La batalla del Marne - Ismael L. Domínguez

Fecha de edición: 2.022

Editorial: HRM

Páginas: 412

Precio: 24,95 €

Género: Historia 

Sinopsis: La gran batalla del Marne, que tuvo lugar en septiembre de 1914, detuvo a los alemanes a pocos kilómetros de París. Estas sangrientas jornadas supusieron un punto de inflexión en la Primera Guerra Mundial (1914-1918). El Marne marcó a todos los participantes y, a la postre, se le atribuyó la responsabilidad de haber iniciado el terrible periodo de trincheras. La presente obra estudia de manera pormenorizada los hechos acaecidos en aquella importante etapa. El libro hace un recorrido desde las primeras acciones en las fronteras a mediados de agosto hasta la conclusión de la campaña veraniega con la propia batalla. En las subsiguientes páginas se desplegarán ante el lector los ejércitos, estrategias, políticas y combates que, al final, estructuraron el enfrentamiento librado en el Marne.

OPINIÓN

Parafraseando a Churchill ninguna parte de la Gran Guerra se puede comparar, por su interés, con el principio. Aquel lejano verano de 1914 enormes ejércitos masivos marchaban hacia la incertidumbre, hacia una guerra que se preveía corta y que el 5 de septiembre en el Marne desembocó en una de las batallas más trascendentales de la historia. Luego vendría el fin de la guerra de movimientos y el estancamiento en las trincheras cuyo máximo exponente lo encontramos en las grandes batallas de 1916, Verdún y El Somme, batallas que han quedado en la memoria popular como una carnicería sin sentido, que lo fueron, con una cantidad de bajas terroríficas, que también, pero inferiores a lo terrible que fue para los soldados la campaña del verano de 1914. Todo esto y mucho más nos lo va a mostrar el joven historiador Ismael L. Domínguez en su primer trabajo "La batalla del Marne. La última campaña del siglo XIX en Occidente". A priori este subtítulo puede llamar la atención del lector pues como sabemos la batalla del Marne ocurrió en el siglo XX, pero como bien nos demuestra el autor esta campaña, fue una bisagra entre dos épocas y puso fin a un siglo XIX que, en muchos aspectos, y no solo en el ámbito militar todavía se alargaba hasta 1914.

Todos recordamos como finalizaba la obra magna de Barbara Tuchman "Los Cañones de Agosto" en los momentos previos a esta batalla y la sensación de frustración de quedarse con ganas de más, y es que paradójicamente existen pocos trabajos que traten exclusivamente la batalla del Marne. Pues bien, Ismael L. Domínguez va a poner fin a esto con un libro estructurado en dos grandes partes claramente diferenciadas, pero, al mismo tiempo, estrechamente vinculadas entre sí. En la primera de ellas "El camino al Marne" el autor nos va a dar una excelente introducción a la batalla analizando pormenorizadamente tanto el contexto histórico como los ejércitos de los tres países que lucharon en ella. Llegado a este punto me tengo que detener en el precioso bloque de ilustraciones a todo color, obra de André Jouineau, en el que se muestran los equipamientos de distintas unidades de los ejércitos occidentales en 1914. Seguidamente el libro entra a analizar los diferentes planes de los contendientes para obtener la victoria, el Plan XVII francés, el Plan W británico y el Plan Schlieffen alemán. Aquí el autor se detiene en las novedosas tesis de historiadores como Terence Zuber que ponen en duda la propia existencia del plan Schlieffen y en caso de que lo hubiera como dice López Domínguez, tendríamos que hablar de un plan Schlieffen-Moltke dado la cantidad de modificaciones que sufrió hasta el inicio de la guerra.

La batalla de las fronteras con los primeros choques en Alsacia, Lorena y Ardenas pondrán de manifiesto la máxima de Clausewitz; ningún plan por bueno que sea resiste su primer contacto con el enemigo, con la realidad. Una realidad que pronto se mostró con toda su crudeza para el ejército francés en dichos territorios mientras llegaban al GCG inquietantes rumores del ala derecha alemana en su avance por Bélgica. Desde estas primeras batallas el autor hace inciso en las diferencias de los diferentes comandantes en jefe, el Generalísimo Joffre que a diferencia de Moltke supo mantener la calma y adaptarse a los desfavorables acontecimientos iniciales viajando por los diferentes cuarteles generales de sus ejércitos e imponiendo su voluntad en contraposición a un Moltke que pese a los aparentes triunfos iniciales iba perdiendo poco a poco el mando y control sobre unas fuerzas cada vez más sobreextendidas, por no hablar de la tensión entre los generales Kluck y Bülow que no fue capaz de encauzar. Caso aparte es el papel del mariscal John French al frente de la BEF con una visión estratégica en la que primaba la supervivencia de sus fuerzas, dando como resultado la mala cohesión con sus aliados, esto quedó claro una y otra vez en las sucesivas batallas llegando a su máxima expresión en la negativa de French a participar junto al Quinto Ejercito de Lanrezac en la batalla de San Quintin-Guisa. A lo largo de estas páginas asistiremos a la gran retirada aliada a través de Francia en la que el autor afirma que los aliados estuvieron al borde del abismo. Sin embargo, en la mente de Joffre había un plan que empezaba a vislumbrase en el Marne.

La segunda parte, "La batalla del Marne" aborda la batalla en toda su extensión para ello López Domínguez la divide en cuatro capítulos que abarcan los diferentes sectores de un frente que abarcaba 250 kilómetros de este a oeste. Se abre fuego en el sector del río Ourq donde se vieron las caras el Sexto Ejército francés y el Primero alemán para pasar a los dos Morins donde entran en juego los británicos y el Quinto francés frente a Segundo Ejército de Bülow. El siguiente sector más hacia el este fue en las marismas de Saint-Gond donde se desarrolló la lucha en un entorno bajo unas condiciones durísimas donde el Noveno ejército de Foch se enfrentó a las fuerzas del Segundo y Tercer ejércitos de Hausen y el Duque de Württemberg respectivamente. Finalmente se afronta la lucha en el sector más alejado de París, Vitry-le-François y Verdún, un sector tradicionalmente tratado como secundario pero que va a resultar vital. El autor nos guía por cada sector de la lucha con un gran pulso narrativo dejando claro que la batalla careció de brillantez operacional, sino que fue un choque frontal en el que triunfó la superioridad numérica francesa en el campo de batalla. Lo que sí tuvo la batalla fue una mística y un relato que se fue formando desde su misma conclusión quedando reflejados en el último capítulo, ayudándonos a entender mucho mejor lo que significó para la memoria colectiva francesa el triunfo en el Marne.

En resumen, con su libro Ismael L. Domínguez nos ofrece una oportunidad única de adentrarse y profundizar en unos acontecimientos que marcaron el desarrollo de una guerra que tras el Marne sería muy diferente a todo lo planificado y lo hace desde el prisma de la nueva historia militar que se acerca al fenómeno de la guerra en todas sus dimensiones, no centrándose solo en los grandes movimientos de unidades sino acercándose también al ámbito político y social, dando como resultado la obra más completa sobre la batalla escrita en español. Después de finalizar su lectura solamente puedo recomendar este excelente trabajo y dar la enhorabuena a su joven autor al que habrá que seguir la pista en sus futuras obras después de tan brillante debut.

En Avant

Andrés CM