Los últimos días del Imperio otomano - Ryan Gingeras

Fecha de edición: 2.023

Editorial: Galaxia Gutenberg

Páginas: 360

Precio: 27 €

Género: Ensayo - Historia

Sinopsis: El Imperio otomano era una de las grandes fuerzas de la historia de Europa desde la Edad Media. En 1914 había perdido mucho territorio, pero seguía siendo el Estado más grande de Europa después de Rusia. El imperio, que se extendía desde el mar Adriático hasta el océano Índico, era una gran entidad política y religiosa, puesto que el sultán gobernaba los Lugares Sagrados y, como califa, era el sucesor del profeta Mahoma.

Sin embargo, la fatídica decisión del imperio de apoyar a Austria-Hungría en 1914, aunque fue capaz de defenderse durante gran parte de la guerra, lo condenó al desastre, lo dividió en varias colonias europeas y llevó al nacimiento de una Arabia Saudí independiente.

El magnífico nuevo libro de Ryan Gingeras, publicado cuando se cumplen poco más de cien años de la marcha al exilio del último sultán, explica cómo se produjeron estos hechos trascendentales y muestra hasta qué punto seguimos viviendo a la sombra de unas decisiones tomadas hace tanto tiempo. ¿Caería todo el imperio en manos de los ejércitos aliados que merodeaban por la región o podría salvarse algo? En semejante laberinto étnico y religioso, ¿qué precio habría que pagar por crear un nuevo Estado cohesionado e independiente? La historia de la caída del Imperio otomano y de la creación de la Turquía moderna es una epopeya extraordinaria y amarga, espléndidamente narrada en estas páginas.

OPINIÓN

Durante generaciones, los analistas del mundo debatieron sobre la posibilidad de la caída del Imperio otomano, posibilidad que algunos consideraban inevitable. Para algunos el colapso del estado otomano comenzó con su derrota en Viena en 1683, proceso que se acentuó en el siglo XIX y terminó al final de la Primera Guerra Mundial con la desaparición del Imperio y el posterior nacimiento en 1923 de la Turquía moderna. Evidentemente la desintegración de un estado tan complejo como el otomano, repleto de diferentes nacionalidades y religiones, y que había dominado gran parte de Europa, Asía y África durante más de 600 años fue muy convulso y traumático.

Ryan Gingeras, profesor del Departamento de Asuntos de Seguridad Nacional de la Escuela Naval de California, afronta la ciclópea tarea de dar luz a un momento histórico fascinante que dio como resultado el nacimiento de un país y una serie de tensiones geopolíticas que todavía hoy día padecemos. El autor mediante una cautivadora y detallada narración pone el foco en diferentes aspectos, como la participación otomana en la Primera Guerra Mundial del lado de la las Potencias Centrales y en el papel decisivo que jugaron las potencias europeas antes y después de la guerra, papel este que tomo forma definitiva con la firma del tratado de Sèvres de 1920.

Dicho tratado tuvo una serie de consecuencias, todas ellas cuidadosamente analizadas por Gingeras: 1. La creación de la República de Turquía, que surgió como el estado sucesor de los otomanos tras la guerra greco-turca de 1919-1922. 2. La  partición de los territorios otomanos entre los aliados vencedores de la Primera Guerra Mundial, que dio lugar a la formación de nuevos países como Irak, Siria, Líbano, Palestina, Jordania, Arabia Saudita y otros. 3. El surgimiento del nacionalismo y el conflicto étnico en las regiones que habían formado parte del Imperio otomano, especialmente en los Balcanes y Oriente Medio, donde se produjeron guerras, genocidios, migraciones y tensiones que persisten hasta la actualidad. 4. La transformación de la cultura y la religión de los pueblos que habían vivido bajo el dominio otomano, que adoptaron nuevas identidades, lenguas, costumbres y creencias, o que mantuvieron su herencia otomana como una forma de resistencia o nostalgia. 

El libro aunque tiene seis capítulos, en mi modesta opinión consta de cuatro partes bien diferenciadas: la primera parte cubre el periodo anterior a la guerra y el inicio del conflicto; la segunda parte se centra en el desarrollo de la guerra y sus efectos sobre el imperio; la tercera parte aborda el final de la guerra y el inicio de la ocupación aliada; y la cuarta parte relata la resistencia nacionalista y la fundación de la República de Turquía.

El autor utiliza una gran variedad de fuentes primarias y secundarias, tanto otomanas como occidentales, para ofrecer una visión equilibrada y rigurosa de los hechos históricos. El libro no solo presenta los aspectos políticos y militares de la caída del imperio, sino también los aspectos sociales y culturales, como la cuestión de las minorías, el genocidio armenio, el papel de las mujeres, la reforma educativa, la secularización y el nacionalismo. Gingeras tampoco olvida el papel de los líderes políticos y religiosos, tanto otomanos como extranjeros, en el proceso de transformación del imperio en una república nacionalista.

En resumen, Los últimos días del Imperio otomano es una epopeya extraordinaria y amarga, que muestra cómo las decisiones tomadas hace más de un siglo siguen influyendo en la situación actual de Oriente Medio. El autor no se deja nada en el tintero, como las atrocidades cometidas por unos y otros, las ambiciones imperialistas de las potencias europeas o las contradicciones internas del movimiento nacionalista turco. Un gran trabajo de Ryan Gingeras y de la editorial Galaxia Gutenberg por traerlo al español.

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Andrés CM